

Según informa "The Financial Times", el holding Dubai World, auténtico buque insignia estatal y autor de la mayoría de las faraónicas obras que se están llevando a cabo en aquel pequeño país, ha pedido una moratoria en el pago de su deuda.
La situación de crisis global ha pasado factura al pequeño emirato, que veía en estas construcciones, un símbolo de su poderío económico. En poco tiempo se ha pasado del crédito fácil a una severa sequía financiera y a una crisis total en el sector inmobiliario. Este anuncio de moratoria en el pago de su deuda de aproximadamente 80.000 millones de dólares, ha indignado a la mayoría de inversores que contaban con que el Gobierno de Dubai cumpliese con su palabra de hacer frente a dicha deuda.
Al poco tiempo de anunciar que había obtenido 5.000 millones de dólares de dos bancos de Abu Dhabi, el Ministerio de Finanzas de Dubai pidió una moratoria hasta el 30 de mayo para Dubai World y su división inmobiliaria Nakheel. Dubai World debería hacer frente al pago de un bono por valor de 4.000 millones de dólares el próximo 14 de diciembre.
Tras despedir a miles de trabajadores, lo más probable es que Dubai World no pueda concluir muchas de las inmensas obras que había comenzado y que afectan: a la torre más alta del mundo y el centro comercial que se iba a construir a su alrededor, además de las ampliaciones previstas en la isla artificial. Según los entendidos, esto puede significar una pérdida total de confianza de los actuales y futuros inversores en Dubai.